viernes, 26 de febrero de 2016

Mapeando Nueva Orleáns, cuarta parte



Esta tarde, El Aperitivo del Ritual vuelve al ground zero de la música afroamericana. A trazar su trayectoria, por los musgosos meandros de Luisiana y las humeantes calles de su mayor ciudad portuaria. Desde Shrevport hasta Nueva Orleáns, esta tarde nos volvemos a adentrar en nuestros pantanales sonoros predilectos, con la inestimable ayuda del DJ, promotor y dealer vinílico, Eduardo Domingo.

Como siempre, de 20h a 21h, en el 100.5 de la FM condal o en www.radiociutatvella.es.

jueves, 25 de febrero de 2016

El Aperitivo del Ritual 19/02/16



 
El viernes pasado se trataba de desempolvar recuerdos olvidados, descubrir y redescubrir tesoros ocultos y arrojar lumbre en los tortuosos pasillos de la música del alma. Pasillos difíciles de escrutar, llenos de tesoros, como unas minas del Rey Salomón de canciones de Soul que, en su momento, no llegaron a la superficie por los motivos más dispares; a veces comprensibles, a veces injustos, a veces alucinantes.

Temas inéditos, sepultados y relegados que la labor de muchos apasionados, enormidad de entusiastas y un puñado de aves de rapiña ha rescatado de una tierra nunca leve.

Para saber cómo fue, pueden preguntar al invitado que honró de nuevo El Aperitivo del Ritual con su visita, Juan Carlos Reyes, alias Juan Carlos Barsoulona, o escuchar la excelsa selección que se trajo en este PODCAST, gentileza de Rakel Escalada y Edu Domínguez.

lunes, 22 de febrero de 2016

Dos décadas de Funk y colindancias



 

Enlace Funk, única revista española dedicada a la música negra a 360 grados, cumple veinte años de vida y lo hace con un número donde, además de un impresionante repaso fotográfico a lo más granado de esa Blackamérica que ha tenido a bien visitarnos, le dedica un monográfico al inmenso James Brown en el que cada colaborador le dedica un texto a un disco específico.

Menda se ocupó del “Gettin’ Down to It”, registrado en 1968 junto al Dee Felice Trío, disco tan hermoso como absolutamente inusitado en la rica producción del Padrino del Soul.

La cosa viene, como siempre, con single de regalo, y pueden adquirirla a través de AQUÍ.

viernes, 19 de febrero de 2016

Almas ocultas




Archivados, arrinconados, almacenados en cintas, demos y acetatos polvorientos. Olvidados, denostados, apaleados injustamente por falta del criterio adecuado o de dinero para darles la producción que merecían. 

A treinta años del final de su era dorada, los 60 y los 70, las catacumbas del Soul siguen arrojando hacia la superficie auténticas joyas, a menudo perfectamente equiparables con lo más granado y amado de lo que sí vio la luz en materia de Soul Underground en su momento álgido.

Para ello, para recordar, para volver a exhumar, para volver a sentir el pellizco de la sorpresa en las mejillas, El Aperitivo del Ritual de esta tarde se dedica a hermosos Soul Unissueds que sonarán en compañía de un sospechoso habitual de la allnighteresca patria, Juan Carlos Reyes, alias Juan Carlos Barsoulona.

Como de costumbre, la cosa tira de 20h a 21h en el 100.5 de la FM condal, en www.radiociutatvella.es o en el podcast disponible a partier de la semana próxima.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Banalizar, instrumentalizar y, si cuela, al talego



 
El tratamiento que en este país se ha dado a ETA y, en general, al terrorismo que se ha perpetrado aquí, es vergonzoso. Si sobre el terrorismo de estado se ha corrido un velo lo suficientemente tupido como para que su presunto Sr. X vaya por ahí dando lecciones de “democracia” (nótese el uso nada fortuito del entrecomillado), lo de ETA no se queda atrás si bien en otros términos: los de su banalización e instrumentalización.

A espaldas de quienes han sufrido la salvajada de su acoso, su impuesto revolucionario, sus balas, su Goma-2, sus amenazas, su presión social, su política del miedo, sus secuestros, sus pintadas y sus cócteles molotov a la puerta de casa; se ha usado a ETA y a su “entorno” (esa celebérrima entelequia garzoniana) como elemento la mar de conveniente para la demonización social y, por tanto, como luz verde para decir y –lo que es peor- hacer lo que le sale del perineo al primer hijo de puta. O a la primera hija de puta, que también las hay como se encarga de demostrarnos la actualidad política a diario. 

La penúltima es una obra de dos titiriteros, denunciando esta banalización del terrorismo y su consiguiente instrumentalización, que acaba con los dos susodichos comiendo cárcel sin fianza. Un resultado a medio camino entre la total legitimidad de la obra que representan –¿lo ven como todo era verdad?- y la  profecía autocumplida. 

Eso, en el mismo país donde la flor y nata de corruptos, estafadores y responsables directos de los despropósitos socioeconómicos que hemos padecido andan libres y sonrientes; destruyendo pruebas y chanchulleando erre que erre que, como no ha dejado de demostrarles la “justicia” de esta meseta, algo queda. 

Palabra de menistro

Y, en pleno pifostio por lo de los titiriteros, va Jorge Fernández Díaz, ministro de Interior de un estado presuntamente europeo, y proclama que “ETA desea como agua de mayo” una determinada coalición de gobierno que, mira por donde, a él y a los suyos no les conviene. 


Al margen de la catadura moral que este señor demuestra (léase un poco más arriba, sobre los políticos y políticas de por aquí): ¿Se imaginan a un ministro británico usando el nombre del IRA así? ¿Se imaginan la crisis que para su partido podría suponer el comentario? ¿La movilización social de quienes sufrieron el conflicto irlandés en sus carnes? ¿La disculpa previa a la dimisión, forzada a patadas en el escroto, por una aseveración tan irresponsable?

Pero aquí “is different”, ya saben. Aquí, el ministro se pasa por el meridiano de Greenwich a los muertos, a los heridos, a los familiares, a los que tuvieron que emigrar, a los que han soportado estoicamente toda aquella mierda y, tras, proferir una barbaridad de tamañas dimensiones, se queda más ancho que largo. Y, posiblemente, se vaya a celebrarlo con una rica  mariscada, o con meretrices de alto copete, o insuflando algún estupefaciente que le permita seguir soltando gilipolleces de tal calibre sin parpadear. O todo a la vez, ya puestos.

Tú tilda de etarra, que algo queda

Porque en ésta -que ni siquiera es república bananera ya que encima es una monarquía- se puede banalizar, usar el nombre de los muertos y las víctimas en vano y a mala leche; y hacerlo para reprimir, demonizar y quitar de en medio quienes ponen en peligro ese pastel que tan ricamente tienen repartido entre cuatro. Y ni siquiera eso, ni siquiera se trata de perseguir a quienes hacen peligrar el statu quo, porque ya me dirán Uds. qué enorme peligro social constituye una pareja de titiriteros.


¿Pero recuerdan cuando se banalizó a ETA para compararla con el Movimiento 15M? ¿Y con Podemos? ¿Y con la PAH? ¿Y con movimientos cívicos a favor del independentismo catalán? ¿Y con jueces que han investigado la corrupción? ¿Y con quienes promueven una Ley de Memoria Histórica? ¿Y con la estanquera del barrio?

Y, todo y con eso, da igual a quien le toque: la impunidad, la carta blanquinuclear, con la que actúan llega a unos límites de encarcelar por algo, tan básico en una democracia, como es la libertad de expresión en una obra de ficción. Al menos, la presunta libertad de quienes se atreven  a cuestionar si lo que los de ahí arriba llaman “sistema” no es, más bien, un entramado de ruindad en beneficio -sistemático, eso sí- de unos pocos.