Escenario de incontables peleas,
borracheras y pasos de baile, la calle Escudellers es una de las vértebras
culturales sobre las que, indudablemente, se apoya el acervo barcelonés. Sus
bares, sus fondas, sus comederos, sus gentes, sus cambios, esa precaria línea
entre la diversión y el descontrol. Sus historias, leyendas, verdades y mentiras.
¿Qué sería de nosotros, moradores de la Ciudad Condal, sin todo ello?
Con este espíritu, nos visitan, esta
tarde, en El Aperitivo del Ritual, Oriol Aparicio e Iván Muench: dos de los
principales protagonistas de la banda sonora de esta calle emblemática quienes,
desde años ya, llenan la pista del Marula con una selección de Rare Grooves
variada, explosiva y de mil sabores distintos.