Con todo listo para la próxima edición del festival Lloret Negre, su directora, la novelista Angelique Pfitzner, se deja caer por El Bar del Post a por una copa de cava y hablar de salir de su zona de confort (cosa que acaba de hacer con su nueva novela, Matilde, primera incursión de la autora en el género histórico), de escribir como necesidad de plasmar aquello que no se puede gritar, del compromiso de proteger la cultura, la educación y los valores y de un Barcelona cuya esencia, sus habitantes, los barceloneses, reivindica sin cortapisas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario