Porque es imposible cansarse de
Thelonious Monk, de su ígneo y febril fraseo, de su audaz concepción melódica,
de la exacta arquitectura de sus harmonías, celebrábamos, el pasado viernes, el
reciente alumbramiento de hasta cuatro grabaciones inéditas del genial pianista
y compositor. En formación de quinteto en 1959, en cuarteto en 1963 por Europa y
en 1968 en Palo Alto, California, haciendo realidad el sueño de un jovencito
californiano de ascendente judío de traer a su héroe a tocar a la fiesta
benéfica de su instituto y, de paso, sentando un momento de concordia y entendimiento
en un crispado contexto de lucha racial.
Escúchese, pues, con el debido
deleite, clicando sobre EL ENLACE AL PODCAST.
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