Ilustre visita familiar al Bar del Post de esta semana, mi
herman(ísim)a, Giulia Valle, se deja caer a pie de barra para hablar de ser
músico y disfuncional, del placer último de enseñar el camino a gente más
joven, de recuerdos sobre miles de escenarios y de una Barcelona que ha barrido
sus paisajes y paisanajes emocionales y que, por tanto, se le antoja
irreconocible.
Redondean el asunto las increíbles fotografías de Sergi
Escribano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario